sábado, 12 de octubre de 2013

Memoria histórica: mártires cristianos en España

Dicen que la Iglesia puede "beatificar a quien quiera" pero tachan de "acto político" reconocer como nuevos beatos a 522 mártires españoles del siglo XX -que no combatieron nunca en ninguna guerra, y, sin embargo, sí fueron secuestrados, torturados y masacrados sólo por su fe-.
REDACCIÓN HO.- Los laicistas de la Plataforma Tarragona Laica han emprendido una feroz y absurda batalla en contra de los 522 mártires españoles del siglo XX que serán beatificados este fin de semana en Tarrogona.
Dicen en el manifiesto 'Beatificaciones contra la memoria histórica' que el hecho de que la Iglesia reconozca como beatos a 522 mártires de la fe en España es un “acto político” que ofende “al bando” que perdió la guerra, como si los mártires hubiesen combatido alguna vez en algún bando.
Los mártires nunca fueron al frente de batalla, nunca cogieron una pistola o cualquier otra arma, nunca amenazaron, ni ofendieron a sus verdugos.
Eran obispos, sacerdotes, religiosos, religiosas y seglares católicos que sólo profesaban su fe pacíficamente y trabajaban ayudando en hospitales, orfanatos, colegios, conventos y parroquias. Fueron secuestrados a la fuerza, torturados y murieron asesinados, bendiciendo y perdonando a sus verdugos y torturadores. Firmes y valientes testigos de la Fe.
hazteoir.org/noticia/54090-laicismo-catal-n-ataca-beatificaci-n-m-rtires-porque-les-perturba-su-memoria-hist-rica

Las cifras son difíciles de dar, pero se calcula que pudieron ser 10.000 los mártires de la persecución religiosa durante la guerra civil, incluyendo tres mil seglares, en su mayoría pertenecientes a la Acción Católica. Hay registrados cerca de 7.000 con nombres y apellidos (11). Estos datos hacen que la persecución religiosa se haya llegado a considerar la peor persecución religiosa en toda la historia. En este sentido, Antonio Montero Moreno:
En toda la historia de la universal Iglesia no hay un solo precedente, ni siquiera en las persecuciones romanas, del sacrificio sangriento, en poco más de un semestre, de doce obispos, cuatro mil sacerdotes y más de dos mil religiosos.

También el historiador británico Hugh Thomas:
“En ninguna época de la historia de Europa, y posiblemente del mundo, se ha manifestado un odio tan apasionado contra la religión y cuanto con ella se encuentra relacionado.”
Y Stanley G. Payne:
“La persecución de la Iglesia católica fue la mayor jamás vista en Europa occidental, incluso en los momentos más duros de la Revolución francesa.”
Se dieron episodios de gran crueldad y de verdadero sadismo; así, hubo casos en que las víctimas fueron quemada vivas, terriblemente mutiladas antes de morir o sometidos a verdaderas torturas psicológicas . También hubo quienes fueron arrastrados por coches. Hubo casos en que se entregó el cuerpo de una persona asesinada a los animales para que lo comieran. Incluso hubo una auténtica cacería de presos.

También es preciso señalar lo que algunos llaman ”el martirio de las cosas”. Desde el primer momento se asaltaron iglesias y conventos quemando imágenes y expoliando los bienes artísticos. Se destruyeron unas 20.000 iglesias -entre ellas varias catedrales- incluyendo su ornamentación (retablos e imágenes) y archivos .Se ha afirmado que estas matanzas se debieron a una explosión de ira popular, tras el levantamiento de parte del ejército el 18 de julio. El investigador catalán Jordi Albertí, que se define catalanista y creyente, afirma que la persecución fue planificada: las planificaron los comunistas libertarios, es decir el partido anarquista (la FAI) y su sindicato, la CNT. Otros grupos de la izquierda fueron cómplices en distinta medida -especialmente entusiastas los comunistas-, o bien se inhibieron con omisiones culpables. Según este investigador: “¿pueden unos descontrolados matar 70 curas al día, que era la media de agosto de 1936?”

 Citas tomadas de : http://www.historia.humanet.com.co/persecusion_religiosa.htm