miércoles, 27 de mayo de 2015

Hijos de familia homoparental

BD.- El lobby homoparental se apoya sobre estudios que, en su casi totalidad, no son más que seudo científicos. La intoxicación está suficientemente bien hecha para que todo el mundo se convenza de que estos estudios prueban que los niños criados por padres homosexuales se portan bien. Sin embargo, sólo basta tomarse el trabajo de verificar la naturaleza de los trabajos citados para entender sus debilidades metodológicas y sus manipulaciones en cuanto a la elección de los grupos estudiados.
Maurice Berger es profesor de sicopatología del niño, jefe de servicio de siquiatría en el Centro Hospitalario Universitario de Saint-Étienne y miembro de varias comisiones interministeriales para la protección de la niñez en Francia. Para el profesor Berger, “el lobby homoparental utiliza un método sencillo: el engaño”. Es imposible imaginar menos objetividad en las publicaciones existentes sobre este tema. “No difference”: esa es la eterna conclusión del conjunto de los trabajos comparativos del desarrollo síquico de los niños criados por parejas homosexuales y heterosexuales. Sin embargo, la casi totalidad de esos trabajos no utilizan métodos científicos rigurosos. Son estudios claramente militantes basados en la palabra de los “padres” (la mayoría de las veces se trata de voluntarios, no elegidos al azar, reclutados por los lobbies homosexuales), ausencia de grupos de comparación, comparaciones con niños provenientes de parejas heterosexuales pero criados en familias recompuestas u homoparentales, efectivos estudiados insuficientes… En definitiva: trabajos que coleccionan defectos metodológícos tan groseros que deberían ser desechados por cualquier comité de lectura digno de ese nombre.

Pero no sólo es el carácter erróneo de los trabajos esgrimidos por los lobbies lo que hay que poner en el expediente contra la homoparentalidad. Un estudio publicado el verano pasado cuestiona radicalmente la línea oficial que prevalece actualmente, que acredita que la tesis según la cual no haría ninguna diferencia en términos de salud mental entre los niños criados por parejas homosexuales y aquellos que lo son por parejas heterosexuales.
Las investigaciones del profesor Mark Regnerus de la Universidad de Texas destruyen el discurso vigente apoyándose sobre el examen de 3.000 niños crecidos en el seno de 8 estructuras familiares diferentes a partir de 40 criterios sociales y emocionales. Los resultados más positivos conciernen a los adultos provenientes de familias “tradicionales”, los cuales manifiestan sentirse más felices, gozan de mejor salud mental y física y consumen menos drogas que los demás.

A la inversa, los niños criados por lesbianas son los que peor estado presentan, con un aumento estadístico inquietante de depresiones en ese grupo. Los adultos provenientes de ese grupo dicen haber sido a menudo víctimas de abusos sexuales (23% contra 2% entre los niños de parejas heterosexuales casadas) y sufren de precariedad económica (69% dependen de prestaciones sociales contra 17% de los criados por su padre y su madre).

¿Por qué un tal divergencia de resultados en esos estudios de psicología comportamental? La explicación la ofrece la calidad del trabajo de Regnerus, que arroja indirectamente una luz cruda sobre los errores metodológicos de los precedentes estudios. El profesor tejano ha tenido mucho cuidado en efectuar su encuesta sobre un gran número de adultos, al contrario de los antiguos trabajos que se limitan a muestras ridículas por su tamaño. Además, Regnerus apoya sus conclusiones sobre las respuestas de los propios interrogados y no sobre los datos aportados por sus “padres”.
Después del análisis del conjunto de las respuestas, la conclusión del profesor Mark Regnerus es indiscutible: el modelo familial que reposa sobre “la unión conyugal estable del padre y la madre biológica (cada vez más parecida a una especie en peligro) sigue siendo el entorno más seguro para el desarrollo del niño”. Todas las demás combinaciones, según el universitario norteamericano, causa un prejuicio a largo término en el equilibrio del niño, sean cuales sean las cualidades humanas y educativas de los homosexuales, que nadie pone en tela de juicio aquí.
Meterse en otra vía que no sea el “modelo familial tradicional” (pareja conyugal heterosexual estable) equivale a negar frontalmente el principio reconocido por la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño, según el cual el interés superior de éste (la parte más débil y sin defensa) debe pasar siempre por delante de cualquier otra consideración.

Esta publicación, que confirma lo bien fundado de la estructura ética y antropológica de la alianza conyugal entre un hombre y una mujer para asegurar el pleno desarrollo del niño, no puede ser silenciado por más tiempo, ante la legalización del matrimonio homosexual en algunos países y su próxima implantación en otros, lo que abre la posibilidad de la adopción por las las parejas homosexuales.
El deber de los gobiernos consiste en verificar la fiabilidad de los trabajos en los que se apoyan los lobbíes homosexuales y darle el lugar que le corresponde al saber y a la ciencia y no a los estudios tendenciosos y amañados de los grupos que militan por los objetivos de grupos exclusivamente motivados por lo que ellos consideran sus derechos. Es necesario un debate a fondo, pues en este tema ¿quién se preocupa del interés de los niños?
alertadigital.com/2013/05/17/el-23-de-los-ninos-criados-por-padres-homosexuales-sufren-abusos-sexuales/

martes, 26 de mayo de 2015

El 87% de los pederastas son homosexuales

La relación que existe entre la homosexualidad y la pederastia es un aspecto esencial dentro de ambos fenómenos y uno de los temas que algunos activistas gay desean negar o ignorar, mientras que otros lo admiten sin reparos.
La Dra. Judith A. Reisman, ex profesora de investigación de la American University y testigo en calidad de experta ante la comisión sobre la pornografía del fiscal general de Estados Unidos, confirma que solamente el 9% de la población heterosexual, es pederasta. En cambio la población homosexual pederasta alcanza el 60%.[1] En otras palabras, el 87% de la población pederasta es homosexual, mientras que el 13% restante es heterosexual. Sin embargo, la Asociación Americana de Psiquiatría, compuesta mayormente por activistas gay, niega que exista esta relación.
Por otra parte, según el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, los pederastas adultos son varones en más de un 90% de los casos. El informe publicado en 2004 por el John Jay College, considerado como el más completo sobre el tema en EE.UU., constata que además, el 81% de las víctimas eran también varones. En otras palabras, ya sea que el agresor se declare homosexual o no, la pederastia implica un acto homosexual en la gran mayoría de los casos, donde tanto el adulto como el niño son varones[2].

Efectos de la educación

El Dr. Alfred C. Kinsey, cuya ideología sexual ha sido objeto del estudio de Reisman, fue uno de los principales responsables de la difusión de un relativismo sexual que incluye la aceptación solapada del homosexualismo y de la pedofilia, relativismo que ha influido mucho en la educación sexual durante las últimas tres décadas.
Contrariamente a la postura difundida por activistas a favor del homosexualismo, la Dra. Reisman dice que los estudios realizados en torno al tema demuestran que los que practican una conducta homosexual son más propensos a maltratar sexualmente a los niños. Un número significativo de hombres que practica el homosexualismo recluta varones menores de edad, práctica que se ha facilitado debido a la "educación" sexual hedonista que se imparte en muchas escuelas públicas de Estados Unidos y a programas "educativos" eufemísticamente llamados "programas de diversidad", que les enseñan a los escolares a considerar el homosexualismo como algo normal y aceptable, dice Reisman.
El periodista Eulogio López, creador del portal Hispanidad.com[3] se refirió a la educación y la homosexualidad de la siguiente manera:
La homosexualidad no es la causa de la actual crisis moral sino su consecuencia lógica. Hace 25 años, cuando un adolescente mostraba las inclinaciones dudosas propias de la edad, se le animaba a cambiar y lo hacía en un 99% de los casos. Hoy se le explica al niño lo de la libre opción sexual. Se lo suelen explicar homosexuales del orgullo gay, pagados por el Estado[4].

Investigación científica

La agencia noticiosa electrónica WorldNetDaily informó sobre la investigación de la Dra. Reisman[5][6] en el número de octubre del 2001 de su revista.

Estudios realizados por Reisman

La Dra. Reisman llevó a cabo dos estudios científicos: Crafting Gay Children: An Inquiry into the Abuse of Vulnerable Youth Via Establishment Media and the School Room ("Niños homosexuales producto del artificio : Una investigación del maltrato de la juventud vulnerable a través del establishment de los medios de comunicación y del aula escolar", traducción libre) y Partner Solicitation Language as a Reflection of Male Sexual Orientation ("El lenguaje seductor como reflejo de la orientación sexual masculina", traducción libre). Ambos estudios constituyen un seguimiento a la labor de investigación que Reisman comenzó con su estudio Kinsey: Crimes and Consequences ("Kinsey: crímenes y consecuencias").
La investigación de Reisman, que se ha basado en estadísticas del gobierno obtenidas en 1992, señala que el 9% de entre 86 y 88 millones de hombres heterosexuales maltrató sexualmente a 8 millones de chicas menores de 18 años, lo cual constituye el 25% de todas las chicas de esa edad. Un porcentaje no determinado de hombres que practican el homosexualismo maltrató de 6 a 8 millones de chicos menores de 18 años, lo cual constituye del 17 al 24% de todos los chicos de esa edad. Ello implica que de 3 a 4 chicos son víctimas del maltrato homosexual por cada hombre que practica el homosexualismo. Sólo 0.09 chicas son víctimas de maltrato sexual por parte de un hombre heterosexual, lo que significa que el promedio de dicho maltrato es que 1 de cada 11 hombres heterosexuales maltrata sexualmente a una chica menor de 18 años.
La Journal of the American Medical Association, la revista de la Asociación Médica de Estados Unidos, publicó los siguientes datos que vienen a corroborar los hallazgos de Reisman: el 50% de las víctimas masculinas del SIDA informaron que, cuando había cumplido los 16 años, ya había tenido relaciones sexuales con un hombre adulto y el 20% de las mismas informó que, cuando había cumplido los 10, también ya había tenido este tipo de relaciones con un hombre adulto.

http://es.metapedia.org/wiki/Homosexualidad_y_pederastia

lunes, 18 de mayo de 2015

Homosexualidad y pederastia

El abuso sexual ha sido tema de discusión y acusación enfocado exclusivamente hacia la Iglesia Católica. El problema es grave y su presencia debe ser erradicada y arrancada desde la raíz. Pero este problema que afecta a muchos niños no es exclusivo de las estructuras eclesiásticas, como dan la impresión los medios de comunicación. El abuso sexual de menores o pederastia se presenta en la mayoría de las instituciones que trabajan con niños y jóvenes y, para sorpresa de muchos, la incidencia de este delito es mayor en las instituciones civiles que en las religiosas.
Cifras y estadísticas de Estados Unidos arrojan conclusiones muy interesantes que dejan ver la naturaleza y raíz del fenómeno. De acuerdo a la Dra. Judith A. Reisman, Experta ante la Comisión de Pornografía del Fiscal General de los Estados Unidos, de la American University, las características de los pederastas se pueden ver al observar que: (1)
  • El 87% de los pederastas son homosexuales
  • El 13% de los pederastas son heterosexuales
  • El 90% de los pederastas son hombres
  • El 81% de las víctimas son niños
  • Entre el 30% y el 60% de los homosexuales registran actividad sexual con menores de edad.
Esto nos habla claramente de la pederastia como una actividad con rasgos homosexuales y de una alta prevalencia entre los miembros de esta población. Nos muestra también que los niños varones están más expuestos que las niñas.
Por otro lado, la incidencia de la pederastia en la población revela un contraste llamativo. El porcentaje de pederastas entre la población civil es del 8.9%, es decir que casi el 9% de la población es pederasta. Este nivel es casi el doble del 4% de clérigos o miembros de alguna Iglesia que se han encontrado que son pederastas. (2)
En esta alta incidencia en la población civil, los ámbitos más afectados son las escuelas públicas, tanto en Estados Unidos como en México. Pero, curiosamente, el caso de su incidencia en estas estructuras estatales, no ha sido tratada ni analizada por los medios de comunicación y organizaciones internacionales todavía. Puede ser que la razón por la que se menciona a la Iglesia como ámbito principal de este delito sea porque es la única estructura que lleva registros exactos, a comparación de las escuelas públicas de estos países, que no llevan datos.
En Estados Unidos, uno de los pocos estudios sobre los casos de maestros pederastas en escuelas públicas es el de la AP (Associated Press) realizado durante el 2007. Este estudio reveló que el abuso sexual en las escuelas públicas de este país era generalizado y casi siempre “encubierto” por los directores de las mismas, al no ser reportado a las autoridades.
En el caso de México, se ha empezado a constatar la presencia de este delito que parece ir en aumento, al surgir múltiples denuncias en escuelas de Chihuahua, Guanajuato, Veracruz, San Luis Potosí y en un complejo deportivo en Jalisco. (3)
Todos estos datos nos dejan comprender mejor un delito que no se está previniendo ni atacando del mejor modo.
Si se quiere proteger a los niños de esta terrible amenaza que los marca de por vida, debe de entenderse a fondo su naturaleza y hacer conciencia, dentro de la Iglesia y fuera de ella, en qué lugares están más expuestos, porque son ámbitos de su vida diaria, como son las escuelas y los centros deportivos.
(1) Judith A. Reisman, Crafting Gay Children. Psychiatric Journal, University of Ottawa, J. W. Bradford et al., 1988
(2) “The nature and Scope of the problem of Sexual Abuse of Minors by the Catholic Priests and Deacons in the United States” 2004 , “The Causes and Context of Sexual Abuse of Minors by Catholic Priests in the United States 1950-2010” 2011. John Jay College of Criminal Justice of New York.
 http://www.agenciacatolica.org/articulos/item/168-lo-que-no-se-sabe-de-la-pederastia.html

lunes, 11 de mayo de 2015

La verdad sobre Ciudadanos

Últimamente se está hablando mucho del partido de Albert Rivera. Algunos incluso lo presentan como “el Podemos de derechas”, quizá con la equívoca idea de que todo lo que hay a la diestra de Podemos es derecha. Desde luego, creo que Ciudadanos es una de las opciones más presentables del centro-izquierda, pero hay cosas en su programa que me parecen inaceptables.
Porque no quiero que los políticos decidan por los padres sobre el idioma
Empezando por su ideario, Ciudadanos afirma: los sentimientos identitarios de tipo cultural, lingüístico o histórico también deben ser excluidos de la esfera pública. Consideramos que las identidades son individuales y no colectivas, producto del libre desarrollo de la personalidad de cada individuo: dada su naturaleza privada, los poderes públicos están obligados a respetarlas sin inmiscuirse en ellas.” Discrepo: claro que existen las identidades colectivas. De no ser así, España no sería una Nación. El problema no es que existan o no, sino cómo se conjugan con los derechos individuales, y en esto Ciudadanos es incoherente. Y es que en el apartado de “lenguas e identidades” de su web afirma: “Proponemos bilingüismo español-inglés en todo el sistema educativo nacional y trilingüismo en las CCAA con dos lenguas oficiales.” Es incomprensible que un partido ponga el libre desarrollo del individuo por encima de todo y a la vez proponga casi lo mismo que ha implantado el PP en Galicia (traicionando su promesa de libertad lingüística): un sistema en el que los políticos siguen decidiendo por los padres, en vez de respetar el derecho de éstos a decidir la lengua de escolarización de sus hijos. Desde este blog vengo defendiendo el modelo de libertad lingüística que propone Galicia Bilingüe, un modelo en el que son los padres quienes eligen la lengua en la que quieren escolarizar a sus hijos. Hace años que sé que ese modelo no es el del partido de Albert Rivera. Primero C’s defendía una escuela bilingüe con una presencia mínima de cada lengua del 35%. Luego lo cambió por un modelo trilingüe de cuotas fijas: “40% catalán, 40% castellano, 20% inglés”. Esperaba que lo reconsiderasen, pero en vez de rectificar, Ciudadanos quiere extender ese modelo a toda España. No lo hará con mi voto.
Porque no quiero que los políticos decidan por los padres sobre la religión
De igual forma, la página sobre educación de la web de Ciudadanos afirma: “Desde el respeto y garantía del derecho de los padres a que sus hijos reciban la formación religiosa y moral acorde con sus convicciones recogidas en la Constitución, en C’s defendemos una escuela pública laica y proponemos la creación de una asignatura específica sobre la historia de las religiones que atienda desde el laicismo los distintos aspectos históricos y culturales de la religión”. Primero dicen respetar un derecho constitucional y luego piden liquidarlo con una asignatura laicista: una tomadura de pelo. Una vez más, lo que propone Ciudadanos es que los políticos decidan por los padres el tipo de educación que han de recibir sus hijos. Y me niego a que tal cosa la hagan con mi voto.
Porque no quiero menos libertad económica y laboral
El ideario del partido de Albert Rivera también afirma: “El ideario básico de Ciudadanos (C’s) se nutre del liberalismo progresista y del socialismo democrático.” Esto me parece una empanada ideológica tan complicada como decirse capitalista y comunista. Esa empanada se proyecta en las propuestas económicas de Ciudadanos: “Necesitamos un sistema fiscal que permita recaudar más sin subir los impuestos, sino haciendo que quienes tienen más, paguen más, persiguiendo el fraude y eliminando deducciones y exenciones.” Hablan, eso sí, de bajar el IVA a un “tipo general entre el 16% y el 19%”, y de rebajar el impuesto de sociedades, pero ¿de qué sirve eso si acto seguido eliminan deducciones y exenciones? Esa calculada ambigüedad acaba yéndose al traste con una de sus propuestas recientes más llamativas: Ciudadanos defiende un contrato único y la supresión de los contratos temporales. Esto dejaría en rigor mortis a un mercado laboral ya muy rígido como el español, dificultando la contratación y propiciando el paro. Así pues, menos libertad económica y laboral, y más dificultades para generar empleo y prosperidad. Que C’s aderece ese alegato echando pestes contra la “Europa de los mercaderes” me parece un homenaje a la demagogia. Europa ha alcanzado la prosperidad gracias al comercio y al riesgo asumido por los emprendedores en el terreno empresarial. Ya está bien de demonizar a quienes invierten y arriesgan sus bienes para crear riqueza y trabajo.
El partido de Albert Rivera también propone un “seguro contra el despido”, que en el fondo sería una cotización más a añadir a las que ya pagamos. ¿Aumentando los costes laborales y los gastos en cotizaciones es como quieren hacer despegar la economía? Además, dice que introduciría un “complemento salarial anual garantizado” para las personas con ingresos más bajos. ¿Y cómo se financiaría, quién lo pagaría? Esto viene a ser una versión reducida de la renta básica que propone Podemos. Al final, e igual que en el caso del partido de Pablo Iglesias, esto es crear políticas de “pan y circo” a costa de los contribuyentes. Por otra parte, resulta difícil de sostener un programa económico que dice que no va a subir los impuestos pero al mismo tiempo pretende disparar el gasto público con esos subsidios (porque por mucho que lo llamen “complemento”, estamos hablando de un subsidio puro y duro).
Porque rechazo toda legislación que permita liquidar a inocentes
He dejado lo más importante para el final. En su página sobre “políticas sociales”, Ciudadanos afirma: “Proponemos una ley de plazos que despenalice la interrupción del embarazo durante las primeras 12 semanas.” Así mismo, añade: “Propondremos un periodo de reflexión para que la mujer tome una decisión libre, consciente y responsable.” También apunta: “Las menores de edad no podrán abortar libremente sin el conocimiento de sus padres.” Se trataría de una ley del aborto menos mala que la vigente, creada por el PSOE y asumida por el PP. Pero “menos mala”, en este caso, es como decir que es menos malo morir de un golpe que morir quemado. Aunque sea menos mala seguiría siendo una norma injusta y cruel, pues permitiría matar a seres humanos inocentes. Desde la defensa de los derechos humanos, derechos que se derivan de nuestra condición humana -condición que adquirimos en el momento de la concepción, no por un capricho político a las 12 ni a las 14 semanas-, apoyar esa ley sería aceptar que alguien tiene derecho a quitarle la vida a un inocente, y eso es algo radicalmente inaceptable en una democracia. Aceptar eso es empujar a nuestra sociedad por la pendiente resbaladiza de la tiranía, pues si consentimos que violen ese derecho de los más inocentes e indefensos, todos los demás derechos están amenazados. Normas como la que propone Ciudadanos, igual que las que defienden el PSOE o el PP, pervierten la democracia y corrompen nuestra sociedad, haciéndola más propensa a aceptar todo tipo de abusos. Al final resulta triste comprobar que en ésta, como en las demás materias citadas, Ciudadanos se conforma con ser una alternativa que se limita a ofrecer los mismos males que el PSOE y el PP pero en distintas dosis, y yo no quiero colaborar con mi voto a eso, lo haga quien lo haga.

 http://www.outono.net/elentir/2015/02/20/por-que-no-votare-a-ciudadanos/