REDACCIÓN HO.- Según informa el rotativo británico The Telegraph, el Departamento de Salud de Reino Unido ha dar a conocer sus planes para, a través de una enmienda a la actual legislación, establecer un nuevo sistema de asesoramiento independiente a las mujeres antes de someterse a un aborto. La iniciativa está diseñada para dar a las mujeres más "espacio para respirar" antes de tan dramática decisión. Grupos en defensa del derecho a la vida indican que este cambio podría reducir el número de abortos en el país en hasta 60.000 cada año. El año pasado se perpetraron en Gran Bretaña 202.400 abortos.
La enmienda legal británica introducirá una nueva obligación para los centros abortistas: deberán ofrecer a las mujeres acceso a servicios de asesoramiento independientes, que se ejecutarán en locales separados por un grupo que no perpetre abortos. La medida pone así el dedo en la llaga de una de las causas que mejor explican también la actual regulación de barra libre al aborto en nuestro país: que, al final, no es más que un servicio sino un negocio millonario.
La medida responde también a las numerosas denuncian sobre que los centros abortistas ofrecen un asesoramiento sesgado a la mujer embarazada, al primar sus intereses empresariales y gestionarse como tales.
El cambio propuesto tiene lugar en vísperas de una votación en la Cámara de los Comunes, que se celebrará la próxima semana, sobre las enmiendas a un proyecto de ley de salud pública presentado por Nadine Dorries, un diputado conservador sin cartera.
De aprobarse, sería la primera iniciativa legal adoptada en torno al aborto desde que la Coalición tomara el poder. Un intento anterior para cambiar la ley -reducir el límite de tiempo para perpetrar abortos de las 24 a las 20 semanas - fracasó en una votación en 2008.
Un portavoz del Departamento de Salud citado por The Telegraph señalaba que: "actualmente estamos desarrollando propuestas para introducir el asesoramiento independiente para las mujeres que buscan un aborto. Estas propuestas se centran en mejorar la salud de la mujer y el bienestar. La decisión final sobre quién debe proporcionar este asesoramiento no se ha adoptado todavía"
La enmienda que se debate implicaría así mismo la retirada de pagos a costa de todos los contribuyentes a las abortorios en concepto de su “servicio de asesoramiento” a las mujeres. Los críticos con los centros de abortos destacan también que el asesoramiento que ofrecen se ve viciado, porque está sometido o influido por su interés comercial o empresarial.
Las nuevas enmiendas a la ley del aborto prevendrían así que las organizaciones privadas que realicen abortos - como Marie Stopes y el llamado Servicio Consultivo Británico al Embarazo (Bpas) – sean quienes ofrezcan el asesoramiento preaborto, que tras la aprobación de la enmienda deberá ser garantizado a la mujer a través de consejeros independientes.
La sra. Dorries, exenfermera, destaca este punto al señalar interés que mueve a los abortorios . El año pasado, Marie Stopes y Bpas llevado a cabo cerca de 100.000 abortos, que se pagaron con alrededor de 60 millones de libras, financiados en su mayoría a través del Sistema Nacional de Salud (NHS). Dorries confía así que las propuestas de enmienda al proyecto de ley de salud inciten al Gobierno a tomar la clase de medidas que hasta ahora ha omitido.
Frank Field, parlamentario laborista, señala: "Estoy ansioso de que el dinero de los contribuyentes se utilice para que las mujeres pueda tener una opción: estamos pagando por un asesoramiento independiente y eso es lo que debe proporcionarse".
hazteoir.org/noticia/41001-reino-unido-modificara-su-ley-aborto-favor-consentimiento-informado