jueves, 2 de junio de 2011

Casi uno de cada dos embarazos...

El aborto pone trágico fin al 41% de los embarazos que se registran en Nueva York

Ante los alarmantes datos, el Arzobispado, junto a diversas entidades cívicas como la Chiaroscuro Fundation o la World Youth Alliance, lanzan nuevas iniciativas en apoyo a la mujer embarazada.
REDACCIÓN HO / Catholic Herald.-  Tras conocerse el alarmante aumento de la tasa de abortos quirúrgicos que se perpetran en Nueva York, donde el 41% de los embarazos terminan con el exterminio de los no nacidos, el arzobispo de Nueva York, monseñor Timothy Dolan, ha lanzado un nuevo plan de apoyo a las mujeres embarazadas.
Reiterando el compromiso adoptado por sus predecesores, monseñor incidió en una rueda de prensa en redoblar " los apoyos que ofrece la Iglesia Católica a través de Cáritas, los servicios de adopción y las ayudas en favor de las mujeres embarazadas, las madres y los lactantes, un apoyo a la vida sin paliativos, ofreciendo alternativas al aborto, así como al cuidado de la salud y a la educación de la juventud para que mantengan un comportamiento sano y responsable, sexualmente virtuoso, por lo que haremos todo lo posible para mantener estos objetivos frente a estas inquietantes estadísticas"
Las estadísticas fueron publicadas a finales del pasado mes de diciembre por el Departamento de Salud e Higiene Mental de la Ciudad de Nueva York, en su resumen anual de estadísticas vitales. Según las cifras, aunque los 87.000 abortos perpetrados en Nueva York en 2009 sigue la tendencia de descenso de  años anteriores,  la tasa global de abortos es mucho mayor que el promedio nacional, situado en un 23 por ciento.
Silencio ante la tragedia
Sean Fieler, presidente de la Chiaroscuro Fundation, fundación privada con sede en Nueva York que apoya las actividades provida, dijo: "No sólo no estamos respondiendo ante esta tragedia humana, sino que ni siquiera estamos hablando de ello". Así, Fieler lamentó que los  neoyorquinos sigan enmarcando esta situación en discutir sobre el aborto en términos de legalidad del procedimiento, en lugar de centrarse en reducir el número de abortos provocados.
La Chiaroscuro Fundation, que comenzó a operar en 2009, invertirá 1 millón de dolares (£ 643,000) este año para ayudar a reducir el número de abortos en Nueva York. Según declaró Fieler a Catholic News Service (CNS), su organización financiará programas de educación sexual frente a embarazos no deseados valorando la abstinencia, así como de apoyo a las embarazadas en situación de necesidad o de dificultad, a través de la Arquidiócesis de Nueva York, las congregación de las Sisters of Life (Hermanas de la Vida), la World Youth Alliance (Alianza Mundial de la Juventud) y  de Expectant Mother Care (Cudado a la Madre Expectante).
También el obispo  de  Brooklyn, Nicholas DiMarzio, insistía en el aspecto educativo, lamentando que la actual educación que se está proporcionando en las escuelas públicas no se incida en ningún aspecto que lleve a reducir la elevada tasa de abortos que padece la ciudad: "Tenemos que comprometernos a ayudar a los jóvenes a entender las consecuencias del aborto y hacer todo lo posible para dar razones a las mujeres para que no aborten y para ayudar a los niños".
David Zweibel, vicepresidente ejecutivo de Agudat Israel de América, organización que promueve las actividades de judíos ortodoxos, señalaba como: "a pesar de nuestras diferentes perspectivas, todos estamos de acuerdo que hay algo que funciona terriblemente mal cuando el aborto se convierte en un método de control de la natalidad". Frente a ello, abogaba por la necesidad de cambiar una cultura que "glorifica la promiscuidad y se burla de la responsabilidad" o, por lo menos, proteger a los jóvenes de las "influencias nocivas de esa cultura".
Sor Lucía María, religiosa de la congregación Sisters for Life, no se ve sorprendida por las estadísticas: "Me gustaría que me sorprendieran, pero o as así: muchas de las mujeres que acuden a nosotros en busca de apoyo y de alternativas han tenido abortos repetidos". La religiosa, llevada por su experiencia en la atención a mujeres embarazadas en situación de abandono o necesidad, afirma que tras esta tragedia está el miedo  que embarga a estas mujeres, que no saben a dónde ir para obtener ayuda. "Hemos fracasado en llegar  hasta ellas y hacerles saber los recursos que tienen disponibles", señala Sor Lucía María.
La congregación religiosa neoyorquina, que ha atendido a 10.000 mujeres embarazadas desde 1991 y que cuenta con 10.000 voluntarios, redoblará ahora esfuerzos, en orden al nuevo plan del arzobispado, para ayudar a mujeres mediante la localización de empleos, la asistencia en el cuidado de su salud , el ofrecimiento de viviendas o de asistencia económica y legal.
www.hazteoir.org/noticia/35258-aborto-pone-tragico-fin-41-embarazos-que-se-registran-en-nueva-york