Cuidar al más débil, un rasgo de la especie que se está perdiendo
Comportamientos más humanos que los contemporáneos se registraban hace más de 500.000 años.
REDACCIÓN HO/EUROPA PRESS.- A diferencia de nosotros, los prehistóricos y supuestamente atrasados habitantes de la Península en Atapuerca cuidaban de sus mayores.
El último Barómetro del CIS, publicado ayer, revela que solo el 1,9 por ciento de los ciudadanos españoles cree que, entre las misiones principales de la familia, figura cuidar de los mayores. Un grupo de paleontólogos del equipo de investigaciones de Atapuerca han concluido que hace más de 500.000 años nuestros predecesores cuidaban a sus mayores aunque estuvieran enfermos o impedidos.
Los investigadores han estudiado los restos fósiles de una porción del tronco y la pelvis de un hombre senil que sufría cierto grado de minusvalía locomotriz. Sus conclusiones, publicadas en la revista PNAS, señalan que la presencia de un individuo anciano discapacitado en una población prehistórica de más de 500.000 años podría ser un indicio del cuidado social dispensado en un pasado remoto a los mayores del grupo.
Según precisa este informe, el equipo científico, formado principalmente por investigadores del Centro UCM-ISCIII de evolución y comportamiento humanos de Madrid, recuperó los restos fósiles de este individuo a lo largo de cinco intensas campañas de excavación en la Sima de los Huesos, una pequeña cavidad situada a más de 30 metros de profundidad en el interior de la Sierra de Atapuerca.
La investigación publicada este lunes ha revelado que este esqueleto parcial, perteneciente a un varón de gran corpulencia física de una especie antepasada de los neandertales, padecía importantes enfermedades degenerativas desde mucho antes de morir, con más de 45 años.
Estas enfermedades tendrían manifestaciones posturales y dolorosas en las zonas lumbar y pélvica, que según los autores del estudio, obligarían al individuo a adoptar una posición encorvada y, quizás, a usar un báculo para mantenerse erguido.
"Por ello, este individuo probablemente estaría impedido para cazar, entre otras actividades", precisan los investigadores para quienes su supervivencia durante largo tiempo con estas discapacidades hace suponer que el grupo social nómada del que formaba parte este individuo tendría una atención especial con sus mayores.
www.hazteoir.org/noticia/cuidar-mas-debil-rasgo-especie-que-se-esta-perdiendo-33343
REDACCIÓN HO/EUROPA PRESS.- A diferencia de nosotros, los prehistóricos y supuestamente atrasados habitantes de la Península en Atapuerca cuidaban de sus mayores.
El último Barómetro del CIS, publicado ayer, revela que solo el 1,9 por ciento de los ciudadanos españoles cree que, entre las misiones principales de la familia, figura cuidar de los mayores. Un grupo de paleontólogos del equipo de investigaciones de Atapuerca han concluido que hace más de 500.000 años nuestros predecesores cuidaban a sus mayores aunque estuvieran enfermos o impedidos.
Los investigadores han estudiado los restos fósiles de una porción del tronco y la pelvis de un hombre senil que sufría cierto grado de minusvalía locomotriz. Sus conclusiones, publicadas en la revista PNAS, señalan que la presencia de un individuo anciano discapacitado en una población prehistórica de más de 500.000 años podría ser un indicio del cuidado social dispensado en un pasado remoto a los mayores del grupo.
Según precisa este informe, el equipo científico, formado principalmente por investigadores del Centro UCM-ISCIII de evolución y comportamiento humanos de Madrid, recuperó los restos fósiles de este individuo a lo largo de cinco intensas campañas de excavación en la Sima de los Huesos, una pequeña cavidad situada a más de 30 metros de profundidad en el interior de la Sierra de Atapuerca.
La investigación publicada este lunes ha revelado que este esqueleto parcial, perteneciente a un varón de gran corpulencia física de una especie antepasada de los neandertales, padecía importantes enfermedades degenerativas desde mucho antes de morir, con más de 45 años.
Estas enfermedades tendrían manifestaciones posturales y dolorosas en las zonas lumbar y pélvica, que según los autores del estudio, obligarían al individuo a adoptar una posición encorvada y, quizás, a usar un báculo para mantenerse erguido.
"Por ello, este individuo probablemente estaría impedido para cazar, entre otras actividades", precisan los investigadores para quienes su supervivencia durante largo tiempo con estas discapacidades hace suponer que el grupo social nómada del que formaba parte este individuo tendría una atención especial con sus mayores.
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