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Tras la Directiva sobre la Protección de los animales utilizados con fines científicos se podría aprobar la utilización de embriones humanos en los experimentos, porque a los sensibles ojos de muchos despiadados, cínicos políticos europeos, es preciso proteger los “derechos” de los animales. El cartel del lince y el bebé de la Conferencia Episcopal, que tanto escándalo causó entre los abortistas, está a punto de convertirse en realidad legal en Europa.
La UE pretende sustituir el uso de animales por “métodos alternativos” a la hora de investigar y/o probar pesticidas, aditivos, medicinas o cosméticos. Y es en esos “métodos alternativos” donde se pueden colar los “mengelianos” procedimientos de la UE (artículos 4.1 y 13.1 de la Directiva sobre la Protección de los animales...). Entre esos métodos figurarían células embrionarias humanas, es decir, células procedentes de embriones humanos. Más: los socios, los estados miembros de la UE, quedarían obligados a utilizar estos procedimientos si la Directiva llega a aprobarse en su actual redacción.
Hay cinco programas recogidos en el Alternative testing progress. Report strategies 2009. Replacing, reducing and refining use of animals in research que en la actualidad utilizan ya células embrionarias en la experimentación: ReProtect, Vitrocellomics, Invitroheart, Esnats y Carcinogenomics.
La Comisión de los Episcopados de la Comunidad Europea, único organismo europeo que hasta ahora se ha pronunciado sobre los riesgos de este proyecto, ha pedido formalmente al parlamento europeo “excluir explícitamente de los métodos de prueba alternativos obligatorios, en el contexto de esta Directiva, los métodos que implican la utilización de células existencias embrionarias humanas”.
hazteoir.org/node/32560 |
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