sábado, 12 de diciembre de 2009

Adios

Pensaba poner una canción de despedida, pero el dispositivo de google no me funciona, y ya no me vale la pena buscar otro. Así que aquí os dejo con mi música de cabecera. Hasta siempre, que os vaya bien. Seguiré publicando de vez en cuando, textos que me gusten, con los que esté de acuerdo, pero no escritos por mí. Espero seguir visitando algunas páginas. Ha sido un placer. Gracias por todo. Besos.


Escribí una movida tan normal
como tú
, como yo y como es.
Conté la historia de mi vida en verso "abc"
que a veces me conviene.
Soñé que la vida es una peli de Buñuel,
que nunca acaba bien,
que siempre me pone a cien.

Que no te tengo delante
y eres lo más importante.

Mi mente es la lavadora,
mis palabras son las manchas,
mi boca es una pistola,
se dispara si te marchas,
pero no cuentes las horas
que no he pasado contigo,
yo no cuento ni una sola,
se me han pasado dormido.
Cuando mi alma se enamora
entre ronquido y ronquido.

Después de comerme el tarro dejé de escribir,
qué cosas más raras pienso, pensé.

Te busqué en el garito que siempre sueles ir,
pero no te encontré,
aunque no perdí la fe,
y hoy te escribo en un papel
"no tengo Internet"
o pinto en la pared,
¡la pared pa quien la pinte!
o hago un disco de Jazz para jugar al despiste.

Que no te tengo delante
y eres lo más importante.

Mi mente es la lavadora,
mis palabras son las manchas,
mi boca es una pistola,
se dispara si te marchas,
pero no cuentes las horas
que no he pasado contigo,
yo no cuento ni una sola,
se me han pasado dormido.
Cuando mi alma se enamora
entre ronquido y ronquido.

Mi mente es la lavadora,
mis palabras son las manchas,
mi boca es una pistola,
se dispara si te marchas,
pero no cuentes las horas
que no he pasado contigo,
yo no cuento ni una sola,
se me han pasado dormido.

Después de comerme el tarro dejé de escribir

Estopa. Jugar al despiste