Ich habe es satt. I'm fed up. Todo tiene el mismo sentido: estoy harta. Pero en francés tiene una connotación especial de "tengo el bote lleno hasta arriba", lo que viene a ser estar hasta la coronilla. Así es como me siento en este momento, en el límite de la paciencia. Las razones no están en mi vida personal que sigue tan apacible como es de esperar, dentro de lo que supone tener tres hijos adolescentes, sino en múltiples temas que me preocupan, especialmente el aborto.
He puesto una barra de música en el blog, aunque no funciona muy bien porque hay que tocarla para que se ponga en marcha. De momento la dejo mientras no tenga algo mejor. En ella no voy a poner, como otras veces, sólamente canciones cuya letra tiene relación con algún asunto, sino música de la que escucho habitualmente porque me gusta, sin ninguna razón en particular. Así que he empezado con Estopa, como habréis visto si alguno ha probado ya el enlace.
Hace tiempo recuerdo que me dijo Codromix que no me pega nada que me guste Estopa y yo le contesté que eso se debe a que tengo un lado oculto. Más bien diría, un lado oscuro. Yo creo en el amor incondicional a la pareja, la familia, los hijos; así como también predico el amor universal a otras culturas, otros países, otros seres vivos. Pero tengo que admitir que también albergo sentimientos como la rabia, el rencor o incluso el odio, y eso me vuelve muy sarcástica.
Por eso, a pesar de que el otro día me sentí muy tentada, voy a dejar las cosas como están. Ya sé que no es justo para la mayoría, que siempre me habéis respetado, que no me habéis ofendido en nada, que sólo queréis aportar vuestro punto de vista. Precisamente por eso, no quiero relacionarme más que lo mínimo mientras no esté segura de que voy a conseguir ser tan ecuánime, tolerante y justa en las contestaciones como me gustaría y como merecéis vosotros.