“Nací
en San Fernando Valley (California, EEUU), la capital pornográfica más
grande del mundo, donde hay más 550 compañías pornográficas”, dice el ex
actor. En EEUU, la pornografía causa estragos, un ejemplo de ello: el
58 por ciento de los divorcios tienen su causa en la pornografía.
REDACCIÓN HO.- De nombre 'Sal', este hombre es una ex estrella de películas pornográficas, ahora, ha conseguido desengancharse de ese mundo de destrucción personal y ha contado la realidad del negocio porno en una entrevista publicada en YouTube por The Pink Cross Foundation (Fundación Cruz Rosa), un grupo que ayuda a las personas a salir de la pornografía. La entrevista ha sido recogida por REL.Sal narra que fue violado a los seis años y que en el instituto ya se prostituía entre sus compañeros. A los 15 años ya hacía películas pornográficas y a los 19 ya había rodado más de cien.
"A través de la pornografía yo buscaba tener la atención de otras personas, pero no tenía felicidad. Yo pensaba que lo tenía todo, tenía mucho dinero pero era miserable". Cuenta cómo con la pornografía llegaron también las drogas y la prostitución, "no se lo recomiendo a nadie", dice.
Ahora, a la edad de 24 años, Sal se ha rehabilitado y ha dejado la pornografía y las drogas gracias a un ministerio llamado Victory Outreach y a la Fundación Pink Cross. "Gracias a Victory Outreach y Pink Cross Foundation, por haberme ayudado. Y doy gracias a Dios por haber estado siempre a mi lado", concluye.
Sal es solo uno de los miles de adultos que ha caído en las redes de la pornografía. Se estima que en los Estados Unidos la edad promedio de exposición a la pornografía es de 11 años, que alrededor del 25% de las búsquedas en internet son para encontrar pornografía, que el 70% de los hombres en edad de 18 a 24 años visitan sitios pornográficos con frecuencia, y que el 58% de los divorcios en dicho país son causados porque uno de los cónyuges sufre de adicción a la pornografía.
hazteoir.org/noticia/52659-ex-actor-porno-pornograf-tiene-drogas-y-prostituci-n-no-se-lo-recomiendo-nadie