Steven Mosher: "España está cometiendo una especie de suicidio demográfico"
Steven Mosher, presidente del Population Research Institute, dedica su vida a desmontar las teorías neomalthusianas que subyacen en la ideología abortista.
REDACCIÓN HO.- Steven Mosher es uno de los mayores expertos en demografía, en especial del caso de China. Ha pasado por algunas universidades españolas en las últimas semanas y estará en el VI WCFMadrid 2012.
- ¿Cuáles son los tres mitos sobre la superpoblación?
- El primero es que el planeta es, o lo será pronto, un lugar donde habita demasiada gente. De hecho, habría que colgar el cartel de “No hay habitaciones” en la Tierra para siete mil millones de personas. Sin embargo, toda la población del mundo podría caber en el estado de Texas, donde cada familia tiene una casa y un patio. Esto es sólo una manera de ilustrar que el mundo sigue siendo un lugar bastante vacío.
La verdadera amenaza no es la “superpoblación”, sino la “despoblación”: Las poblaciones de los países desarrollados están estancadas o en declive. Europa y Japón podrían perder la mitad de su población en 2100.
Ochenta países sufren el problema de estar situados por debajo de la tasa de reposición poblacional, definida en los 2.1 hijos por mujer. Incluso, el en mundo desarrollado, la familia se está hundiendo, pasando de los 5 hijos de media en 1960 a menos de 3 en la actualidad. Y el declive continúa.
La población mundial está envejeciendo, lo que lleva al cierre de escuelas, la caída de los precios de las casas y de la Bolsa y a asistir a economías moribundas. Piensen en Grecia. Una vez que la población llegue a su máximo (unos 8 mil millones de personas en 2040), y aplicando la “proyección de variante baja” de la ONU, empezará a decrecer. A lo que nos enfrentamos no es a una “explosión demográfica”, sino a una “implosión demográfica”.
El segundo mito es que estamos peor ahora con más gente de lo que estábamos en décadas pasadas con menos. La verdad es todo lo contrario: a medida que nuestros números han crecido, nuestra prosperidad se ha disparado. En 1960 había sólo tres mil millones de nosotros, y el ingreso mundial per cápita era de apenas 1.500 dólares. Hoy en día, al pasar la marca de 7 mil millones de seres humanos, el ingreso per cápita ha aumentado a 9.000 dólares.
Mientras la “explosión demográfica” es un mito, se ha producido una verdadera explosión en la salud y la longevidad: Todavía en el siglo XIX, 4 de cada 10 niños murieron antes de cumplir cinco años de edad. Hoy en día la mortandad en menores de cinco años es menor del 6% y sigue en caída. Hace doscientos años, la esperanza de vida era de menos de 30 años. Hoy es de 69 años y sigue subiendo. Como la gente vive más, naturalmente, somos mas.
La producción mundial de alimentos y de recursos nunca ha sido mayor: se produce suficiente grano para que cada persona consuma 3.500 calorías diarias. No hay necesidad de que nadie muera de hambre en medio de esta abundancia. La raza humana nunca ha estado en tan buenas condiciones.
El tercer mito es que los programas de control de la población, también conocidos como programas de planificación familiar o los programas de salud reproductiva, benefician los objetivos demográficos. El hecho es que estos programas dañan a las mujeres y matan, causando violaciones de los derechos humanos y socavando la atención primaria sanitaria.
El caso más conocido es el de China, donde las mujeres son detenidas por el “delito” de estar embarazada de segundos hijos “ilegales” y se someten a abortos y esterilizaciones forzadas. Si fuera sólo una cuestión de los ancianos que gobiernan China, haciendo caso omiso a los derechos reproductivos de una quinta parte de las mujeres del mundo, ya sería suficientemente negativo. Pero el uso excesivo de la fuerza en la búsqueda de una agenda de control de la población se extiende por todos los continentes (excepto Australia) y muchos países en desarrollo. Una lista resumida de los países y las violaciones –44 en el último recuento- ocupa un total de dos páginas de mi último libro Control de la Población: Costes reales y beneficios ilusorios. Para dar sólo un par de ejemplos: mujeres en Indonesia han sido llevadas a punta de pistola por militares para esterilizaciones obligatorias; y cientos de miles de nativos americanos que se expresan en quechua fueron presionados por el Gobierno peruano para aceptar una ligadura de trompas. Mientras hablamos de esto, los hospitales administrados por el Gobierno en México esterilizan o insertan el DIU en las mujeres después del parto, con o sin su consentimiento, de forma rutinaria.
Teniendo en cuenta esta larga y triste lista de abusos, el lector entenderá mi escepticismo sobre que un programa de control de la natalidad pueda ser, al tiempo, administrado por un gobierno sin ser coercitivo, especialmente en el contexto de un país en desarrollo. ¿Desde cuándo la visita de un funcionario del Gobierno ha sido una buena cosa, aun cuando el Gobierno en cuestión no es una dictadura militar con un pésimo historial de derechos humanos? Piense en las estructuras de poder en el trabajo. Cuando un representante del Estado aparece en el umbral de la casa de una mujer pobre y dirige su informe a la clínica estatal de control de la natalidad para una ligadura de trompas, o por su próxima toma de Depo-Provera, tenemos con claridad un elemento de coerción. Cuando una madre indigente busca atención médica para un niño enfermo y tiene que aceptar una botella de píldoras anticonceptivas como condición para el tratamiento, su anticonceptivo no puede ser descrito como “voluntario”.
El fundamento del personal médico se desvió para poner en práctica programas de control de la población: no hay gente para proporcionar la penicilina a los niños enfermos, o pastillas contra la malaria para aquellos que sufren esta enfermedad. Las mujeres y los niños mueren como resultado de la falta de atención sanitaria de primera necesidad.
- Explíquenos tres modos de combatir estos mitos
- Déjame que te cuente cómo estamos derrotando estos mitos en el Population Research Institute. Para educar a los jóvenes (y a cualquier otro usuario de internet), hemos creado una serie de dibujos animados en YouTube. Estos videos geek, descarados, ya han obtenido más de un millón de visitas hasta la fecha. Se puede ver en Overpopulationisamyth.com. Míralos y luego pásenlos a sus amigos. Se van a cambiar corazones y mentes en este tema.
Otra vía para desarmar estos mitos es tratar de que se reduzca la financiación a las organizaciones de control de la población, como el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) y la International Planned Parenthood Federation (IPPF). Hasta ahora, hemos reducido casi en mil millones de dólares sus presupuestos combinados. Esto ha salvado vidas al obligar a estas organizaciones a recortar algunos de sus programas.
Quisiera instar a los españoles a hacer lo mismo. Yo estaba consternado al descubrir, en un reciente viaje, que en España gracias al régimen de Zapatero, es ahora uno de los principales contribuyentes al Fondo de Población de las Naciones Unidas con la entrega de 53 millones de dólares para el UNFPA en 2010. Se trata de la misma organización que está involucrada en los abortos y esterilizaciones forzadas en la China de la política del hijo único. Es un escándalo que los contribuyentes españoles se vean obligados a subsidiar un programa brutal de control de la población que viola las normas internacionales de derechos humanos. Les insto a ejercer presión sobre el poder legislativo para cortar todos los fondos de esta agencia de la ONU.
La tercera manera de combatir estos mitos anti-vida es dar charlas y organizar conferencias en todo el mundo. Este año estaremos organizando y dando conferencias en los EE.UU., Canadá, Australia, España, Nueva Zelanda, Gran Bretaña, Irlanda, Japón, Filipinas y México.
- ¿Por qué cree que el WCF Madrid 2012 es importante?
Mosher: Voy a ir a Madrid de nuevo en mayo, porque creo que el WCF Madrid 2012 es el encuentro más importante del año, sin excepción. Es importante no sólo para el futuro de España, sino también para Europa como un todo.
Como sabe, España está cometiendo una especie de suicidio demográfico a cámara lenta. Las tasas de natalidad son demasiado bajas para mantener la población actual y no hay signos de recuperación. El mito de la superpoblación sigue siendo frecuente y demasiados los jóvenes creen que lo socialmente responsable es no tener hijos.
Espero que el WCF ayude a recordar a los españoles la importancia de la familia natural como la unión para toda la vida de un hombre y una mujer a través del matrimonio, unidos por la fe y la tradición y abiertos a tener hijos. Los niños son el único futuro de una familia, y el único futuro de una nación. Las parejas que están dispuestas a casarse y están abiertos a tener muchos hijos son un tesoro nacional que debe ser protegido y fomentado. Vengo a Madrid para animar a los jóvenes: “sed fecundos y multiplicaos".
Felicito a HazteOir.org por ser el principal huésped español de este evento clave.
hazteoir.org/noticia/45121-steven-mosher-espana-esta-cometiendo-especie-suicidio-demografico
REDACCIÓN HO.- Steven Mosher es uno de los mayores expertos en demografía, en especial del caso de China. Ha pasado por algunas universidades españolas en las últimas semanas y estará en el VI WCFMadrid 2012.
- ¿Cuáles son los tres mitos sobre la superpoblación?
- El primero es que el planeta es, o lo será pronto, un lugar donde habita demasiada gente. De hecho, habría que colgar el cartel de “No hay habitaciones” en la Tierra para siete mil millones de personas. Sin embargo, toda la población del mundo podría caber en el estado de Texas, donde cada familia tiene una casa y un patio. Esto es sólo una manera de ilustrar que el mundo sigue siendo un lugar bastante vacío.
La verdadera amenaza no es la “superpoblación”, sino la “despoblación”: Las poblaciones de los países desarrollados están estancadas o en declive. Europa y Japón podrían perder la mitad de su población en 2100.
Ochenta países sufren el problema de estar situados por debajo de la tasa de reposición poblacional, definida en los 2.1 hijos por mujer. Incluso, el en mundo desarrollado, la familia se está hundiendo, pasando de los 5 hijos de media en 1960 a menos de 3 en la actualidad. Y el declive continúa.
La población mundial está envejeciendo, lo que lleva al cierre de escuelas, la caída de los precios de las casas y de la Bolsa y a asistir a economías moribundas. Piensen en Grecia. Una vez que la población llegue a su máximo (unos 8 mil millones de personas en 2040), y aplicando la “proyección de variante baja” de la ONU, empezará a decrecer. A lo que nos enfrentamos no es a una “explosión demográfica”, sino a una “implosión demográfica”.
El segundo mito es que estamos peor ahora con más gente de lo que estábamos en décadas pasadas con menos. La verdad es todo lo contrario: a medida que nuestros números han crecido, nuestra prosperidad se ha disparado. En 1960 había sólo tres mil millones de nosotros, y el ingreso mundial per cápita era de apenas 1.500 dólares. Hoy en día, al pasar la marca de 7 mil millones de seres humanos, el ingreso per cápita ha aumentado a 9.000 dólares.
Mientras la “explosión demográfica” es un mito, se ha producido una verdadera explosión en la salud y la longevidad: Todavía en el siglo XIX, 4 de cada 10 niños murieron antes de cumplir cinco años de edad. Hoy en día la mortandad en menores de cinco años es menor del 6% y sigue en caída. Hace doscientos años, la esperanza de vida era de menos de 30 años. Hoy es de 69 años y sigue subiendo. Como la gente vive más, naturalmente, somos mas.
La producción mundial de alimentos y de recursos nunca ha sido mayor: se produce suficiente grano para que cada persona consuma 3.500 calorías diarias. No hay necesidad de que nadie muera de hambre en medio de esta abundancia. La raza humana nunca ha estado en tan buenas condiciones.
El tercer mito es que los programas de control de la población, también conocidos como programas de planificación familiar o los programas de salud reproductiva, benefician los objetivos demográficos. El hecho es que estos programas dañan a las mujeres y matan, causando violaciones de los derechos humanos y socavando la atención primaria sanitaria.
El caso más conocido es el de China, donde las mujeres son detenidas por el “delito” de estar embarazada de segundos hijos “ilegales” y se someten a abortos y esterilizaciones forzadas. Si fuera sólo una cuestión de los ancianos que gobiernan China, haciendo caso omiso a los derechos reproductivos de una quinta parte de las mujeres del mundo, ya sería suficientemente negativo. Pero el uso excesivo de la fuerza en la búsqueda de una agenda de control de la población se extiende por todos los continentes (excepto Australia) y muchos países en desarrollo. Una lista resumida de los países y las violaciones –44 en el último recuento- ocupa un total de dos páginas de mi último libro Control de la Población: Costes reales y beneficios ilusorios. Para dar sólo un par de ejemplos: mujeres en Indonesia han sido llevadas a punta de pistola por militares para esterilizaciones obligatorias; y cientos de miles de nativos americanos que se expresan en quechua fueron presionados por el Gobierno peruano para aceptar una ligadura de trompas. Mientras hablamos de esto, los hospitales administrados por el Gobierno en México esterilizan o insertan el DIU en las mujeres después del parto, con o sin su consentimiento, de forma rutinaria.
Teniendo en cuenta esta larga y triste lista de abusos, el lector entenderá mi escepticismo sobre que un programa de control de la natalidad pueda ser, al tiempo, administrado por un gobierno sin ser coercitivo, especialmente en el contexto de un país en desarrollo. ¿Desde cuándo la visita de un funcionario del Gobierno ha sido una buena cosa, aun cuando el Gobierno en cuestión no es una dictadura militar con un pésimo historial de derechos humanos? Piense en las estructuras de poder en el trabajo. Cuando un representante del Estado aparece en el umbral de la casa de una mujer pobre y dirige su informe a la clínica estatal de control de la natalidad para una ligadura de trompas, o por su próxima toma de Depo-Provera, tenemos con claridad un elemento de coerción. Cuando una madre indigente busca atención médica para un niño enfermo y tiene que aceptar una botella de píldoras anticonceptivas como condición para el tratamiento, su anticonceptivo no puede ser descrito como “voluntario”.
El fundamento del personal médico se desvió para poner en práctica programas de control de la población: no hay gente para proporcionar la penicilina a los niños enfermos, o pastillas contra la malaria para aquellos que sufren esta enfermedad. Las mujeres y los niños mueren como resultado de la falta de atención sanitaria de primera necesidad.
- Explíquenos tres modos de combatir estos mitos
- Déjame que te cuente cómo estamos derrotando estos mitos en el Population Research Institute. Para educar a los jóvenes (y a cualquier otro usuario de internet), hemos creado una serie de dibujos animados en YouTube. Estos videos geek, descarados, ya han obtenido más de un millón de visitas hasta la fecha. Se puede ver en Overpopulationisamyth.com. Míralos y luego pásenlos a sus amigos. Se van a cambiar corazones y mentes en este tema.
Otra vía para desarmar estos mitos es tratar de que se reduzca la financiación a las organizaciones de control de la población, como el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) y la International Planned Parenthood Federation (IPPF). Hasta ahora, hemos reducido casi en mil millones de dólares sus presupuestos combinados. Esto ha salvado vidas al obligar a estas organizaciones a recortar algunos de sus programas.
Quisiera instar a los españoles a hacer lo mismo. Yo estaba consternado al descubrir, en un reciente viaje, que en España gracias al régimen de Zapatero, es ahora uno de los principales contribuyentes al Fondo de Población de las Naciones Unidas con la entrega de 53 millones de dólares para el UNFPA en 2010. Se trata de la misma organización que está involucrada en los abortos y esterilizaciones forzadas en la China de la política del hijo único. Es un escándalo que los contribuyentes españoles se vean obligados a subsidiar un programa brutal de control de la población que viola las normas internacionales de derechos humanos. Les insto a ejercer presión sobre el poder legislativo para cortar todos los fondos de esta agencia de la ONU.
La tercera manera de combatir estos mitos anti-vida es dar charlas y organizar conferencias en todo el mundo. Este año estaremos organizando y dando conferencias en los EE.UU., Canadá, Australia, España, Nueva Zelanda, Gran Bretaña, Irlanda, Japón, Filipinas y México.
- ¿Por qué cree que el WCF Madrid 2012 es importante?
Mosher: Voy a ir a Madrid de nuevo en mayo, porque creo que el WCF Madrid 2012 es el encuentro más importante del año, sin excepción. Es importante no sólo para el futuro de España, sino también para Europa como un todo.
Como sabe, España está cometiendo una especie de suicidio demográfico a cámara lenta. Las tasas de natalidad son demasiado bajas para mantener la población actual y no hay signos de recuperación. El mito de la superpoblación sigue siendo frecuente y demasiados los jóvenes creen que lo socialmente responsable es no tener hijos.
Espero que el WCF ayude a recordar a los españoles la importancia de la familia natural como la unión para toda la vida de un hombre y una mujer a través del matrimonio, unidos por la fe y la tradición y abiertos a tener hijos. Los niños son el único futuro de una familia, y el único futuro de una nación. Las parejas que están dispuestas a casarse y están abiertos a tener muchos hijos son un tesoro nacional que debe ser protegido y fomentado. Vengo a Madrid para animar a los jóvenes: “sed fecundos y multiplicaos".
Felicito a HazteOir.org por ser el principal huésped español de este evento clave.
hazteoir.org/noticia/45121-steven-mosher-espana-esta-cometiendo-especie-suicidio-demografico